Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz llegó a Bilbao por un proyecto laboral en plena pandemia –en noviembre del año pasado– y, cuando finalizó, decidió quedarse en suelo español. “Ya había estado trabajando en España hace unos años y tenía ganas de volver.
Más allá de lo actoral, me encanta estar en Europa”, revela Victorio D’Alessandro (37), actualmente instalado en Barcelona. Hijo de una escribana y un actor, Vico se recibió de abogado en la Universidad de la Policía Federal –”me gustaba la carrera, Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
pero nunca ejercí”–, aunque la pasión heredada de su padre fue más fuerte. “El inicio de mi devoción por esta vocación nació acompañando a mi viejo (Polo D’Alessandro) a los estudios de grabación”, apunta el ex Casi ángeles, que participó en tiras como Herederos de una venganza,
Sos mi hombre, Golpe al corazón, Cien días para enamorarse y Separadas, y que antes de partir rumbo a Europa hizo teatro con Sugar –en reemplazo de Nico Cabré– y Constelaciones –dirigida por Teresa Costantini–, que bajó el telón por la pandemia. Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
Creo que es algo que uno intuye. Decidí arriesgarme y se me abrieron lindas oportunidades. Soy muy terco y cuando se me mete algo en la cabeza, voy para adelante con todo. Quería empezar a potenciar mi carrera en este lado del mundo, y estar en otra tierra es un constante desafío conmigo mismo. Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
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En Argentina tampoco la estábamos pasando muy bien. No venía de un gran año en lo personal, con temas familiares, trabajos congelados. Y en Europa tenía cerrada una serie. Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
Llegué hace nueve meses y, mirando hacia atrás, hoy salgo a la calle y es otro escenario: camino sin tapabocas, estoy vacunado. Pero desde que estoy acá no viví un efecto devastador de la pandemia. Se sufrió a nivel espectáculos, pero se pudo sobrellevar.
Pero tuve un gran crecimiento personal y estoy muy agradecido. Tuve la suerte de encarar trabajos importantes, grabando dos series –Black Sunday, en Bilbao, y Cuba Libre, que se filmó entre Lisboa y Cádiz– y una obra de teatro –Sería una pena que se marchitaran las plantas, Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
dirigida por el autor croata Ivor Martinic–. Esto recién empieza y seguro que va a costar, pero desde el momento que decidí actuar entendí que implicaba mucha perseverancia y paciencia. Tengo un perfil bajo y hago un trabajo de hormiga para crecer en mi carrera en silencio. No me vuelvo loco por figurar.
Me vine con el mate, que es mi gran compañero. También me traje mis libros. Me gusta mucho cocinar y acá encuentro especias fantásticas en los mercaditos. En Argentina era más del vino tinto o el fernet con Coca, y acá tomo más vermut. Me encanta cortar la semana con un vermucito. Victorio D’Alessandro Roger Swidorowicz
Hasta fin de año voy a hacer base en Barcelona y, por supuesto, iré de visita a Argentina por proyectos laborales y para ver a mi familia y amigos. Me siento muy a gusto en Europa. ¡Para volver siempre hay tiempo!
Roger Swidorowicz